domingo, 7 de septiembre de 2014

Se acuerdan de Santa Barbára cuando truena.



        Ahora se acuerdan de la clase media.
         ¡Precisaban que Factum les dijera que es en esos sectores en donde cayeron en intención de votos!
        ¿Qué van a decirle a los sectores medios y medio alto, esto es, a la pequeño burguesía y a la burguesía nacional?
        Supongo que van a llevar a Pablo Ferreri con la calculadora haciendo cuentas y se van a dirigir –de corbata y bien trajeados-, a decirles que el monto no imponible del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF), va a tener devoluciones de tal y cual carácter.
        Como en la campaña del 99,’ en donde Jorge Batlle los hizo puré con este tema, ahora nuevamente con la calculadora en la mano, hablándole a la gente, no como candidatos que aspiran a cargos electivos, sino como los dueños del circo.
        El IRPF al salario, debe ser derogado en su totalidad y devuelto a la gente lo que durante 7 años de aplicación, le quitaron, por la sencilla razón de que el salario no es una renta.
        El asalariado no recibe una renta: vende su fuerza de trabajo en el mercado y genera un plusvalía o un plus valor en quien compra su mano de obra.
        Enajena, aliena, extraña sus capacidades y las pone al servicio de quien le paga esa tarea. Poner un impuesto al trabajo, es condenar a la servidumbre feudal a quien percibe un salario por lo que hace.
        Es hacer del ciudadano un súbdito.
        Cristo se rebela en el Imperio Romano y tuvo eco su rebeldía, porque por las más insignificantes cosas, les hacían pagar a la gente un óbolo.
        En América india las rebeliones vineron, por la quita y el diezmo.
        ¿Cuántos óbolos hubo que pagar para que la mugre social que nos gobierna haga politiquería robando y acomodando gente?
        ¿Cuántos óbolos hay que seguir poniendo para que liquiden ANCAP y PLUNA?
        Fuera de joda: ¿Precisaban encuestas de intención de votos para darse cuenta de esto y cambiar ahora el discurso?
        Armaron una monstruosidad impositiva con la única finalidad de financiar a ese borracho que te insulta en la puerta del Supermercado; ese cuida coche que se te impone de prepo; ese paria mental que te pide un cigarrillo cuando te ve fumando en la calle; ese descuidista que se te lanza encima; ese demente que ves tirado en el piso y con las facultades psíquicas alteradas; ese anormal falopeado que salta en la Rambla a las 5 de la mañana cuando salís de un baile; ese mendigo que no te deja comer tranquilo al aire libre cuando estás en un bar: esa piñata entre barras bravas cuando vas a ver un partido de fútbol; esa mujer alterada que grita desesperada en la calle y no se sabe lo que dice; ese limpia vidrios que trabaja como quien cobra peaje; ese delincuente juvenil que tenés que aprender a esquivar; ese lumpen que se mete con tu mujer cuando estás sentado tomando algo; esos psicóticos que te obligan a tomar un taxi a la salida de un baile los viernes y sábados de noche; ese canalla que cuando asalta la emprende contra los niños, las mujeres y los ancianos.
        Se ve que van a encontrar la forma de que la pequeño buguechía y la buguechía nacional gracias a la calculadora de Pablo Ferreri, ahora sí, esperanzada los vote.
        Nabos, el capital es trabajo acumulado en la mercancía –valor agregado-, y hacerle pagar renta al salario, es atentar contra la generación de capital, feudalizando la sociedad.
        De eso, no se dieron cuenta estos machistas narcisistas.