lunes, 30 de noviembre de 2009

Para el Uruguay está bien.



Hoy vivimos una realidad internacional y latinoamericana que se debe tener en cuenta a la hora de interpretar lo que está ocurriendo en el Uruguay.

Como si existieran hilos invisibles, los procesos de diversos países toman un perfil similar, aunque bajo realidades diferentes.

En Venezuela, que parece ser el gatillo que dispara estas nuevas realidades que hoy tenemos, gobierna un ex golpista, prominente dictador y payasesco personaje, cuyo único protagonismo internacional es insultar un día sí y otro también, a los Estados Unidos de América, mientras destruye la economía. Chávez sabe por diablo, pero más sabe por Castro, que multiplicar los pobres es la vía regia para perpetuarse en el poder, ofreciendo el plato de lentejas, a cambio de toda la suma de poder político.

En Bolivia gobierna un indio que cuando el Parlamento no le vota una ley, no se le ocurre nada mejor que hacer huelga de hambre. Un Presidente que hace eso es, sin ningún lugar a dudas, un oprimido fisiológico, un pobre mental.

En Brasil gobierna un obrero metalúrgico que no sabe inglés y que parece ser esa la condición que le abre unas puertas hacia Estados Unidos, que otros con mayor preparación no lograron. Un hombre cuyo único mérito es haber insultado desde los años 80’ a toda la política que se hizo en Brasil para, al llegar al Gobierno, ser su mejor continuador.

En Paraguay gobierna un sacerdote cuya mayor especialidad es dejar preñada a cuanta mujer se le cruza por el camino. Un hombre llamado a tener el mismo destino que San Agustín, el día que escriba sus confesiones.

En la Argentina gobierna una mujer, que vive para su ropa, los perfumes y la alta cosmética. Una bellísima criatura que cuando tiene una cita con otros mandatarios se viste de formas totalmente exóticas. Es de lo único que entiende, porque el resto, lo lleva a cabo su marido, el ex Presidente Kirchner.

En Estados Unidos gobierna un negro, cuya mayor especialidad es ir por el mundo declarando que él y su país tienen buenos sentimientos para con los demás.

En Italia gobierna un magnate que le gusta las orgías y las fiestas sexuales y a nadie le parece mal que así sea, más allá de los escándalos que arma la prensa.

Como se puede apreciar en cada lado gobierna, la sombra de ese país.

Cuando le preguntaron a Mujica que pensaba de Chávez dijo: “Para Venezuela está bien”. Cuando le pregunten a nivel internacional a otros mandatarios que piensan de Mujica, dirán: “Para el Uruguay está bien”, es decir, para un país de cuarta, se entiende, con ferviente vocación a ser de quinta.

Lo que hay que entender es que en Venezuela gobierna un payaso prepotente, porque el venezolano es eso. En Bolivia gobierna un ignorante con mentalidad oprimida, porque el boliviano es así. En Brasil gobierna un obrero calificado cuyo mérito es hacer bien los deberes, porque el brasilero es como ese hombre. En Paraguay gobierna un cura fornicador, porque el paraguayo es eso. En la Argentina gobierna una criatura más digna de la farándula que de otra cosa, porque la Argentina es así. En Italia gobierna una cosa como Berlusconi, porque el italiano es como él. En Estados Unidos gobierna un negro, porque el americano es eso: impulso, instinto y reflejo.

Pregunto yo: ¿A alguien puede sorprenderle que en el Uruguay gobierne un viejo cascarrabia, ordinario, boca sucia, prepotente y con un historial de robos a bancos y asesinatos que erizan hasta al más curado de espanto? El uruguayo es eso.

Mujica, para el Uruguay está bien.

sábado, 21 de noviembre de 2009

Los ultras, ese cachito que le falta al Frente Amplio para llegar



La dirigente del movimiento Plenaria, Memoria y Justicia Irma Leites al criticar con dureza al presidente, Tabaré Vázquez, al candidato presidencial del FA, José Mujica, y al ex tupamaro Eleuterio Fernández Huidobro por “subirse al carro” del plebiscito por la anulación de la Ley de Caducidad, dijo una cosa que es cierta: Estaban los votos para ganar con el Sí.

Lo que no dice Irma Leites es que los tupamaros a la salida de la dictadura fueron indemnizados –son los grandes indemnizados de nuestra historia‑ para algo, no fue porque sí, eso.

Acusa con certeza al Frente Amplio de instrumentar dicho vallado, pero olvida que cada vez que su movimiento participa, algún incidente grave suele ocurrir.

Mc Donald’s, una víctima anterior de la agresión gratuita de este movimiento, con sabiduría supo paralizar el despropósito de esta gente cada vez que se moviliza “contra el imperialismo”.

Afirma Leites, desde su mentalidad totalmente antidemocrática e irrespetuosa de la voluntad popular, dijo que el resultado del plebiscito del 25 de octubre no cierra el reclamo por la anulación de la ley, sino que la lucha continuará. Pierde de vista que si hubo gente del Frente Amplio que cuando le dieron la lista con la papeleta del Sí y del voto epistolar incluido, quitó ambas y sin embargo, votó al Frente que auspiciaba esas opciones, no es por Tabaré Vázquez, Mujica o Huidobro, sino porque esas personas piensan, en esos dos temas, diferente a sus dirigentes, por más señales que algunos de ellos den, de no estar del todo de acuerdo, con eso.

Esta es gente confundida, que no sabe interpretar lo que sucede en la cabeza de un electorado que no necesariamente piensa en todos los temas igual al partido que, por diversas razones, luego vota.

Lo que sucedió con el voto epistolar es clarísimo: Todos sabemos que lo favorecía enormemente al Frente Amplio, en un sistema en dónde, epistolar o no, el voto es obligatorio. Sin embargo su gente, consideró desleal que desde el exterior otros que no viven la realidad interna decidan acerca de qué Gobierno deben tener los que viven la realidad de ese Gobierno.

Lo que Irma Leites no entiende es que cuando existe un divorcio tan importante en amplios sectores del electorado entre los dirigentes y su gente, algo ocurre que exige interpretación. No hay que olvidar que votaron por Sí, blancos y colorados y en cambio frentistas, quitaron el Sí de la papeleta. Lo que está indicando que si no llegaron a la cifra requerida es porque muchísima, pero muchísima gente del Frente quitó el Sí. Hacerles por tanto, el agravio de pensar que son satélites o monigotes de Tabaré Vázquez, Mujica o Huidobro, que formalmente apoyaron el Sí, aunque con actitudes que lo desmentían, no es una buena política para ubicarse en los tiempos que corren.

Se avecinan otros tiempos políticos y nuevas carnestolendas.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Entre el pasaporte y la credencial.



Un misterioso personaje muere a tiros en Shangrilá. Jorge Batlle irrumpe en la campaña haciéndose preguntas básicas, que según el politólogo Adolfo Garcé, son plausibles. Si algún error hubo en lo que dijo Jorge Batlle fue por el periodista que no le puso signos de interrogación a la parte que implica a Marenales. Donde dijo “El único tipo que puede tener 500 armas acá o más se llama Marenales. No hay otro”, debió haber dicho: “¿Quién es el único tipo que puede tener 500 armas acá o más? ¿Marenales o hay otro?”.

Lo llaman a declarar ante la Justicia porque esa parte no tenía signos de interrogación, pero más allá de la puntuación, una sola cosa es cierta, sea o no sea Marenales el que está detrás de esto, Feldman era un hombre de ultra izquierda. Obviamente, hoy la policía técnica no descarta ninguna posibilidad. Puede ser Zabalza o el grupo Fogoneros o Irma Leites o la Plenaria ¿qui lo sá? Puede ser Pedro Balbi o la complicidad del montonero Patiño Mayer desde la embajada argentina. Puede ser la ETA coordinando con innombrables del aparato tupamaro. La sospecha a Marenales es plausible, pero debió darse en forma de pregunta, porque lo que puede ser que esté detrás de esto huele muy feo, huele a berretín, tatucera y cloaca.

El Frente Amplio impulsa muy suelto de cuerpo a un asesino serial como Mujica Cordano a la Presidencia de la República. Un hombre que de lo único que está arrepentido es de haberse metido con el Ejército, porque si se hubiera limitado a emprenderla contra la clase media y más nada, le hubiera salido todo redondo.

La sociedad uruguaya está anestesiada y dormida, ya no razona y parece haber perdido los reflejos democráticos que en el pasado tornaban inadmisible para otros hombres, este tipo de cosas.

Me temo que estas denuncias no ejerzan ninguna influencia en el electorado. Todos recordamos la campaña veraz y contundente, con videos y declaraciones de Topolansky e Huidobro que hizo el Foro Batllista en el 2004, para constatar lo inocuo que suele ser en este Uruguay de ahora, decir la verdad y mostrarla en videos.

La democracia uruguaya camina de la transición de una dictadura, al suicidio y a nadie parece preocuparle mucho eso. Es evidente que en el proceso político uruguayo una voz fue silenciada para siempre. Se apagó la voz de los espíritus mejores.

El liberalismo –ese liberalismo bajo el cual fueron permeadas las divisas que hicieron al Uruguay‑ hoy contempla perplejo un hecho inocultable: hay quienes saben utilizar la democracia contra la democracia y se valen de la libertad que ésta les ofrece, para actuar contra la libertad.

El candidato nacionalista, Luis Alberto Lacalle, dice una cosa que es cierta: Se necesita el equilibrio de poderes como contrapeso para que el Uruguay no vaya de cabeza a una dictadura chavista, pero la pregunta que cabe a esta altura del partido es la siguiente: ¿A quién le puede importar el equilibrio de poderes cuando se vota a un asesino serial disfrazado de Martín Fierro?

Uno nunca creyó que se pudiera llegar a esto y caer tan bajo en la sociedad uruguaya, pero es inocultable que ya no se puede negar la realidad que tenemos por delante.

Las democracias también se suicidan. Es una posibilidad que libremente tienen cuando la gente opta democráticamente por destruir la democracia.

Se lo vengo diciendo desde hace tiempo a todo el mundo. Este Uruguay no tiene nada que ver con aquel que nos vio nacer. Hace 10 años que lo vengo afirmando y sosteniendo y expresando a cuanta persona conversa conmigo.

El doble discurso frentista es la expresión de una traición a otros hombres que hoy ya no están. Es el trabajo de zapa, lento, eficaz y corrosivo de usar los instrumentos de la democracia para ir saboteando a cada paso las libertades públicas. Es la oposición gratuita y alevosa de mala fe a todo lo que hacen los demás, para luego salir él a llevar a cabo no lo mismo, sino lo peor de lo mismo.

Feldman resulta que ahora es un “misterio”. Todos sabemos que en política no existe la casualidad, sino la causalidad. Hay, no nos engañemos, poderosos intereses creados en apuntalar a Mujica. Todos hemos visto el rol que jugaron los medios de comunicación hacia él y todos hemos vivido en esta campaña la presión del servicio de inteligencia para que no se lo ataque a Mujica. El Uruguay es un pañuelito, somos pocos y nos conocemos, como para no darse cuenta de donde vienen las sombras y bultos que se menean.

La burguesía uruguaya es débil. Es una pobre burguesía, que se come la plusvalía. Engorda, pero no crece.

Novedoso es constatar ahora que como socio local no es confiable y merece el mismo destino que la burguesía venezolana. Al igual que aquella le van a decir: “Ustedes generaron un monstruo y ahora tienen las consecuencias. Sólo Hércules cometió el error de limpiar los establos de Augías, y si el estiércol se fue amontonando en cantidades monumentales y generó todo tipo de gérmenes que fue invadiendo a todo el país y desatando grandes pestes, es un problema de ustedes”.

Se ve que para cierta gente el Uruguay no precisa ni una burguesía nacional próspera, ni una clase media asentada, sino antes bien, una lumpen burguesía que vive de la rapiña semi colonial y opera en un entorno semi feudal entre hombres de media cuchara. Al fin y al cabo, para el rol geopolítico que le es asignado al Uruguay, es suficiente. Para muchos el Uruguay no es un país, sino una joda con fronteras.

La pregunta que uno se hace al ver esta trampa mortal en la que estamos, es la siguiente: ¿Cómo se sobrevive a estos 5 años que se avecinan?



jueves, 5 de noviembre de 2009

Preguntas del ex Presidente Batlle


Cantando la justa


El ex presidente de la República, Jorge Batlle, formuló numerosas preguntas que aún permanecen sin respuestas claras a propósito del misterioso arsenal de armas hallado en el barrio Aires Puros, a raíz del cual murieron en un tiroteo un policía y el propietario del armamento, el contador Saúl Feldman.

Estas son las declaraciones que Batlle formuló al semanario “Búsqueda”.

“El asunto de las armas es feo. En primer lugar, ¿por qué lo mataron al hombre? Si no le tiran, el hombre se entrega o se suicida, pero estos le tiraron hasta matarlo. El señor (viceministro del Interior Ricardo) Bernal declara sin que nadie le pregunte que esto no tiene conexión política ninguna. ¿Cómo sabía que no tiene conexión política ninguna si el asunto estaba en pleno proceso y no había tenido tiempo de investigar absolutamente nada? El señor juez dice lo mismo ¿Y cómo sabe el juez si tampoco, cuando hace esa declaración por televisión, tiene el más mínimo conocimiento ni siquiera de cuánta es la cantidad de armas, ni cuál es la naturaleza y el origen de las armas? ¿Cuántas son las armas? Dicen que son 600; yo le digo que son el doble. Y yo le digo que este hombre hace dos años que tenía conexión con (el líder tupamaro Jorge) Marenales ¿Cómo es posible pensar que un señor haya podido entrar Kalashnikov en el Uruguay? ¿Por qué aduana lo entró? ¿Con qué documentación de importación lo entró? ¿Y cómo sería el contrabando de este señor solo allí, en esa casa? ¿Por qué este señor tiene un búnquer en la casa? ¿Y por qué desde ya salen diciendo que esto es la mafia brasilera? ¿Por qué acusan al Brasil? ¿Dónde está la prueba? ¿Dónde está la documentación? ¿Y por qué dicen que tenía un cáncer terminal? ¿Por qué lo dijo la mujer que trabajaba con él, que el año pasado había ido a atenderse del cáncer? ¿Dónde está todo ese conocimiento y esa información? ¿No hay ninguna información veraz? ¿Quién inició el incendio? ¿Así que tenía 100 quilos de pólvora y él mismo mandó a hacer un incendio para que explotara todo el barrio? ¿Los bomberos han informado de qué naturaleza fue el incendio? ¿Cómo se inició el incendio? ¿Quién inició el incendio? ¿Qué clase de incendio es? ¿Cómo afectó para nada a los elementos explosivos que había ahí adentro? ¿Fue un incendio para que alguien descubriera o es un incendio artificial y accidental? No existe esa información. No existe información de qué naturaleza son las armas ni cuál es el origen. Las armas tienen todas, un origen en el mundo. Pero si no tienen origen y son Kalshnikov, es todavía mucho más grave ¿Son hechas especialmente sin origen, para que nadie sepa de dónde vienen ni quién las manda?

¿Y el Ejército? ¿Qué parte le han dado al Ejército en la información cuando se trata de armas de guerra, con granadas antitanque? ¿Contra qué tanque? ¿Desde cuándo precisan pólvora, detonadores y mechas los narcotraficantes? ¿Y desde cuándo precisan rifles con bazucas antitanque? ¿Cuántos arsenales similares a éste hay? ¿Será el único? ¿Habrá otro “cortocircuito” que genere la posibilidad de encontrar otro arsenal parecido en otro lugar? ¿Y por qué este tipo tenía una barra de oro? ¿ Dicen ”que porqué se pagan con oro las armas”? ¿Así que como los narcotraficantes se suponen porque uno dice que se pagan con oro las armas, éste negociaba con los traficantes. Así lo dice la autoridad desde ya. ¿Y con qué pruebas lo dice? ¿Con qué documentación? ¿Con qué conocimiento lo dice antes de 24 horas de haberlo matado al tipo? ¿Y por qué lo mataron al tipo? ¿Por qué le metieron 18 tiros? ¿Por qué se pretende autorizar a la Policía que había justicia por mano propia cuando se trata de la muerte de un policía? ¿Y por qué a un tipo que tiene 500 armas como mínimo y que tiene seguramente más como me han dicho a mí de fuentes veraces, le mandan a un policía simplemente, a golpearle la puerta, como si fuera a dar una notificación? ¿Por qué el tipo mata al policía de entrada? Lo Mata porque tiene una enfermedad terminal ¿O lo mata porque no se puede entregar, porque si se entrega tiene que decir muchas cosas que no quiere decir? ¡Pero si ni saben cuántas son las armas! Porque en el primer recuento, dijeron 500, después dijeron 600 ¿y cuántas son al final? La información que tengo yo es que son más del doble ¿Dónde están los documentos correspondientes de sus libretas, de sus teléfonos y de sus conexiones? ¿Dónde está la información? ¿De dónde sacaron el conocimiento de que era para narcotraficantes las armas? El único tipo que puede tener 500 armas acá o más se llama Marenales. No hay otro¿ De quién era amigo ese señor? ¿De qué alto jerarca del Frente Amplio era amigo? ¿No sería amigo de Marenales? Hay un secreto absoluto. No se permite ver nada, nadie da ninguna información. El Gobierno no dice nada, el Ejército no dice nada, la Policía no dice nada, el juez pidió que lo agarraran vivo y le encajaron 18 tiros, de los cuales dos en la cabeza cuando prácticamente, el tipo estaba muerto. Es un gran arsenal; no es un arsenal para bobadas. Y no hay ningún tipo de explicación de cuánto, de cuándo, ni de qué manera una persona sola, de vida tranquila, pueda haber hecho esta acumulación de armas ¿Por qué el silencio del Gobierno, y por qué el silencio de los candidatos del Gobierno, cuando ellos tienen qué penar que la sospecha principal es contra ellos?

martes, 3 de noviembre de 2009

Mis razones para votar a Lacalle en el balotaje.



Soy consciente del hecho de que como estamos en presencia de una irracionalidad raras veces vista en la historia política desde los tiempos de Nerón a la fecha, argumentar en este contexto contra ella, puede resultar totalmente inocuo.

No obstante voy a dar mi parecer sobre las razones por las que pienso que en el balotaje hay que votar por Luis Alberto Lacalle

Al Frente Amplio si algo lo ha caracterizado a lo largo de su historia es la dificultad enorme que tiene para dirigirse a toda la opinión pública uruguaya.

Desde los tiempos de Seregni, siempre tuvo la misma dificultad. Vive de internismo discutiendo para adentro y se dirige a los demás, en forma indirecta, propio de la mentalidad estaliniana que a nivel mundial, ya desde hace mucho, fue quedando atrás. Cuando se habló en Europa de un socialismo con rostro humano, se apeló a una imagen de esa naturaleza justamente, para sacarse de encima gente como la que hoy tenemos.

El gran problema de Seregni, lo que le impedía crecer y marcaba un techo insuperable para el Frente Amplio, era que se dirigía a todo el mundo como si los demás fueran tendencias internas de dicha fuerza. Para él, todos eran compañeros, no ciudadanos.

Esa mentalidad está expresando el hecho, fácilmente constatable de que al Frente y a la mentalidad frentista, le importan muy poco los temas nacionales. Lo único que les interesa son los espacios políticos, los ámbitos de deliberación, las instancias de debate y el perfil político. Todos temas como para una agencia de publicidad. Un Frente obsesionado por la cosmética política e ignorante de la misma, parece ser la identidad que deja Seregni en dicha fuerza. Con Tabaré Vázquez logra romper el techo, por la sencilla razón de que aprendió expresión corporal y el arte de hablar sin decir nada. Era hacerle un reportaje a Vázquez, para tener que llamar inmediatamente a un politólogo, de modo que explique, lo que quiso decir.

Siempre fue igual, siempre se caracterizó por poner un mascarón de proa sustentado por el aparato, alguien que cumpla con la condición de ser mediático y todo ese aparataje infernal de grupos, grupúsculos y fracciones –gente pequeña, menor, incapaz de conquistar su lugar en política por mérito propio‑ entra en acción a repetir consignas como papagayos.

Todos vimos con este Gobierno la incapacidad enorme de alcanzar acuerdos con la oposición en los entes autónomos, servicios descentralizados y organismos del Artículo 222. El sectarismo y el menosprecio a la oposición, es algo que los ha caracterizado hasta el hartazgo. Parecen no haberse dado cuenta que la democracia no es el Gobierno de la mayoría, sino el Gobierno de la mayoría que gobierna con la minoría.

Siempre hablándole a la opinión pública en su conjunto como si los tres millones de uruguayos, fuésemos una tendencia interna metida allí adentro. Con el agravante de que cuando discuten enfurecidos, lo hacen con su ultra izquierda y con más nadie. La única opinión que les merece digna de ser refutada es la que dan los ultras.

Con Mujica el Frente encuentra un nuevo escenario: el paria social, el desclasado, el plancha, el lumpen, todos especímenes repudiados en el pasado por la izquierda clásica y los mismos tupamaros. Le decían gambusa, a la gente así que hoy los vota.

Para una fuerza que tiene dificultades enormes en dirigirse a la opinión pública, no es poca cosa dar con un conducto que le permita expresarse y ser escuchada.

Pero aún así en este caso, llevando el resentimiento y el odio de clases hasta límites inconcebibles de agresividad verbal, expresa de otra manera contenida, la misma dificultad de fondo: No es capaz de hablarle a toda la opinión pública. Por eso el Uruguay está polarizado.

Creo que lo que se necesita, más allá del tema de las mayorías parlamentarias, es un presidente de y para todos los uruguayos.

Por eso sostengo que hay que votar a Luis Alberto Lacalle.

domingo, 1 de noviembre de 2009

La irresistible ascención de Emiliano, el gran encantador de serpientes, que nos faltaba.



Confieso que estoy tan asombrado como el que más al leer las cifras del escenario político que tenemos por delante.

Aquí no hay vuelta de hoja y cuando las urnas cantan, lo que dicen aunque sea duro, hay que entenderlo e interpretarlo.

Si alguien se toma la molestia de leer los artículos de este foro, podrá encontrar argumentos hasta el cansancio, para enfrentar políticamente a este elemento.

Pertenezco a la época en donde refutar políticamente algo, tenía su sentido. Siempre fui de los que creí en la palabra y el juicio como modo de transformar la realidad y participar en política. Me encuentro hoy con una realidad nueva, en dónde las palabras huelgan y los juicios políticos pagan tributo, cuando vienen de un lado y en cambio cuando son de otro, se puede decir cualquier cosa al voleo.

En ese proceso, en donde fui dando mi opinión a cada paso de la campaña, ocurrieron muchas cosas en mi vida personal, que no vienen al caso aquí. Me llamé, por diversos motivos a silencio, en el tramo final de la campaña. No creo que Lacalle haya cometido errores, sino que la percepción de lo que es acierto y error, hoy está manipulada. Yo hubiera hecho la campaña de otra manera, apelando al sentimiento y la emoción de ser oriental, no meramente blanco; no hubiera argumentado nada importante, ni puesto en discusión una sola idea y me hubiera limitado al hecho de ser el más experimentado, el más capaz para timonel de los uruguayos.

Digo esto porque lo que se está enfrentando es una irracionalidad que puede decir cualquier disparate, de modo que no se ve la razón por la cual, hay que poner ideas al viejo estilo. Es una opinión que me sobrevino a cierta altura de la campaña, pero más allá de eso, nada garantiza que de haber sido las cosas como estoy diciendo ahora, los resultados hubieran sido mejores.

Soy consciente que mi opinión molesta, no solo a quienes enfrento con esta única arma que es mi teclado, sino también a otros, que por lo visto están en misa y en la replicación, en la lucha contra la subversión y la subversión, también.

Escribí un artículo, hace ya tiempo atrás, que tiene más vigencia ahora que entonces y que se llama, El hombre irracional en el Uruguay de hoy en donde digo claramente que la racionalidad en política pudo muy poco contra el nazi fascismo en su momento.

Como decía Mac Namara, “La racionalidad no nos va a salvar” cuando se enfrentan cosas que están más allá de uno mismo. El multiverso sigue siendo incognoscible y las fuerzas que lo mueven escapan, en gran parte, a nuestro entendimiento limitado.

Pienso que aquí es Shumpeter quien tiene algo importante que decir. Traduciéndolo del castellano traducido al lunfardo impresentable, lo que nos dice en buen romance es esto: Cuando los agentes intervinientes en el proceso productivo de una sociedad –la burguesía nacional‑ se ponen a escupir del plato donde comen, porque todo eso que el sistema les brinda no significa nada para ellos, es cuando el capitalismo cae. No importa el Producto Bruto Interno, ni la macroeconomía, la balanza de pagos o la balanza comercial, si los que van a intervenir como agentes económicos, reniegan del sistema. Si nada significa para ellos, los premios que el orden existente de cosas les brinda, el capitalismo, sencillamente, cae.

El Uruguay es un pequeño país en la Cuenca del Plata, aguantado artificialmente desde afuera por razones que están más allá de lo económico y que hacen al lugar privilegiado que ocupa en lo geopolítico, entre dos gigantes.

Si ha sido el país de lo no viable, viabilizado, lo fue por la sencilla razón de que existió, en sus agentes intervinientes ‑la burguesía nacional‑ la voluntad política de que así fuera. Cuando Lord Ponsomby le dice al Conde de Itamaratí que “Inglaterra quer fomar península hanseática para comerciar y negociar”, no habla solo, no predica en el desierto, habla así, porque encontró socio local en la pujante burguesía mercantil portuaria de la época.

Cuando Alberdi dice que “Civilizar es poblar”, lo afirma por la admiración que suscitó en él, ver como un pequeño país despoblado, traía más inmigrantes que Argentina, al Río de la Plata, proporcionalmente, considerado.

Nunca me gustó ser agorero del desastre, porque la esperanza es lo último que se pierde pero evidentemente, el Uruguay ha retrocedido muchísimo más de lo que aparentemente, parece.

Ya sabemos que cada país tiene el Gobierno que se merece y que ese divorcio entre la base y la cúpula que algunos creen ver, es totalmente falso; las bases son peores que sus dirigentes.

Hasta el 25 de octubre de 2009, sentí sobre mis hombros la responsabilidad política de enfrentar este estropicio que existe ahora, hoy siento que la responsabilidad ya no es más mía, ni tengo porqué aportar mi pequeño granito de arena: Hoy la responsabilidad es de aquellos que no querían que “avive giles”, porque haciendo un juego doble, se sienten vida y milagro. Si tienen una salida mejor, quiero verla, porque así como vienen las cosas, van camino al Averno, también.

Ahora, que se hagan cargo los “dublé” de ese monstruo televisivo que minuciosamente, se pusieron a fabricar.