jueves, 18 de diciembre de 2014

El partido de la concertación es la esperanza real.

     El partido de la concertación es la esperanza real en poder tener nuevamente una Montevideo mínimamente, decente y próspera.
     Aquí hay que hacer una aclaración fundamental. Una cosa son los partidos fundacionales y otra los tradicionales.
    Tradicionales somos todos. El partido socialista nace en 1905, a impulsos del después defenestrado por Gargano y José Diaz, el ala trotskysta posadista y Raúl Sendic, doctor Emilio Frugoni, "Maestro de Juventud".
    El partido comunista, después de las tesis de abril, traiciona a Frugoni, se le queda con todo y nace en 1920, a impulsos de la patota de camioneros que lideraba, el también después defenestrado por Rondey Arismendi, Eugenio Gómez.
     El MLN -Movimiento de Liberación Nacional, Tupamaro-, nace en 1963, cuando Ben Bela viene al Uruguay y un grupo de muchachos quiso aprender las técnicas argelinas del Frente de Liberación Nacional de dicho país.
     Todo esto significa que el partido socialista tiene 109 años, el partido comunista "los primos", tienen 94 años y los tupamaros que eran los recién llegados y anti políticos, tienen 51 años. Pregunto yo: ¿Alguién cree que los únicos tradicionales son aquellos que tienen 178 años?
    Cuando uno habla de los partidos fundacionales está diciendo algo muy concreto que hace al partido nacional y el partido colorado.
     El partido de la concertación es lo nuevo, nace a impulsos de los fundacionales, los independientes y aquel sector de clase media culta que fue frentista y no los vota más.
     Esperemos que funcione y que los dirigentes estén a la altura de meter un gol bien metido.