viernes, 3 de octubre de 2014

Ser blanco y nacionallista no es para quirimbos y poca hontas



        Cualquiera se dice blanco y nacionalista, pero ser blanco y nacionalista, todo junto a la vez, no es para para quirimbos.
        Hoy estamos delante de un gobierno que se disfrazó de “blanko”, cuando le convenía fassanezcamente y que ahora destila todo su odio de peronista a lo John William Coocke, mitrista, sub imperialista y anti uruguayo.
      Blanco quiere decir tradición antigüista, familia integrada y respeto a la propiedad privada.
        En el adversario tradicional, es digno reconocerlo, hay gente muy bien, pero blanco quiere decir tradición, familia y propiedad.
        Esta gente que hoy nos gobierna, es tan enemiga de la tradición nacional que el día de nuestra Independencia, lo bautiza como el día de la Unidad Básica, quise decir, del Comité de Base.
   Odian tanto la familia que ponen como modelo de convivencia el concubinato, el aborto, la familia homosexual y le dan más derechos que al matrimonio convencional.
        Atacan la propiedad privada desde el salario de los que se ganan la vida trabajando, pasando por las ocupaciones de fábrica y el copamiento de casas y predios.
    No nos engañemos: Obran conscientemente en el sentido leninista del término, saben a dónde quieren ir.
   Están acostumbrados a cebarse del partido nacional, sólo, pura y exclusivamente, porque hay dirigentes que tienen miedo al miedo.
        Existimos otros que no les tenemos temor alguno y entonces nos atacan con falsos amigos y traidores disfrazados, para disuadir, para que nos callemos y que no se nos pueda discutir en el terreno elevado de las ideas.
        Dicen los chupamaros que están jugados, pero se equivocan, porque los blancos también estamos jugados.
        Gane o pierda el Perfecto Idiota Latinoamericano a la uruguaya, Tabaré Ramón Vázquez Rosas, el partido nacional por su tesón, valor, integridad y dignidad será el verdadero vencedor de la contienda.
        Como Pio Socarrás tendremos que dejar los libros para poder leer, pero ellos, como Dorticós, los suicidarán y junto a ellos jugaran su suerte los quitamotas, los parlaembalde, los lechuguinos encorpetados, el tucanaje, los agentes dobles y el chivataje de Almacén de Ramos Generales.
        El partido nacional hoy en el incilio, de pronto mañana en el exilio, como decía Wilson: “Es el vengador de la República”.





Si pequeño "Gran Hermano" te pincha
el video haz click aquí. 
 
o aquí 

O busca en Google o Youtube