martes, 24 de junio de 2014

Partido Nacional, juventud y Frente Amplio.

       El Frente tenía toda su artillería cargada contra Larrañaga; se burlaba, como lo hizo Vázquez en un acto indigno de un presidenciable y lo tenía a Pedro de reojo, como cajón de sastre para enrostrarle su apellido, mientras tiene apellidos como el de $endic, que no dan ni para empezar.
       Desde el gobierno querían polarizar la campaña al estilo 71’, en una falsa dicotomía del tipo Bordaberry-Tabaré y, Pedro con altura supo contestarles como corresponde. El Uruguay no será un experimento de Soros. Los “progres” estaban en esa dicotomía, o ninguneaban al Partido Nacional o se burlaban de Larrañaga. Estamos hablando de gente que no tiene códigos morales para proceder y para quienes el fin, justifica los medios. Verdadera “gilada” que trepó por los andariveles del sistema político y desde su andamiaje no hizo otra cosa que degradar cuanta institución pudo.
       Ahora se miran al espejo y descubren que están viejos y que la juventud es importante.
       El Partido Nacional representa la juventud culta, instruida, bien formada y con esperanzas de un Uruguay mejor. El joven que quiere salir a flote en la vida y triunfar, y no el que quiere vivir de arriba a expensas de los nabos de siempre, los contribuyentes.
       Ellos son el vejestorio y el bichicomerío mental que le prende fuego a las escuelas, que ataca las comisarías y que sólo se siente bien cuando se da la papa.
       Es mucho el daño que le hicieron al Uruguay –el monstruo chavista que crearon va a costar sacárselo de encima- y es mucho más el que piensan hacerle a futuro, no bien la economía empiece a complicarse.
       Están movilizando jóvenes para usarlos de pantalla. Quieren maquillar el cadáver descompuesto de una dirigencia obsoleta, verdadero Parque Jurásico castrista.
       En el Partido Nacional el joven es un hombre que participa, opina, da su juicio, en el Frente, en cambio, la juventud es eso que lo único que sabe hacer es discutir si la pintada la hacen en este o aquel lugar, si el afiche va aquí o allí, o si el volante lleva este o aquel tipo de letra. Carne de cañón para meter pechera a último momento de la campaña política, masa de maniobra, brazo político.
       ¿No se dan cuenta que los jóvenes frentistas que están contra la baja son precisamente los delincuentes?
       El que habla claro, a mi entender dentro del Frente Amplio es Xavier Ferreira. Se da cuenta que lo juvenil atenta contra lo frenteamplista, por la sencilla razón marxista de que se pierde la acumulación de fuerzas alcanzada. La juventud no tiene necesidad de justificar lo injustificable, para defender un mal necesario, llamado Frente Amplio.
       El joven frentista es el producto de una familia enferma de desprecio retrospectivo. El odio de ayer, no les deja ver la realidad de hoy. Son seres sin determinación política alguna, que van a hacer lo que quieren los padres y más nada.
       Xavier Ferreira, sin embargo, habla claro. No cree en la renovación porque pierde la acumulación de fuerzas marxistas que lograron.

       Esperemos que los jóvenes en el Uruguay de hoy, no sean simples tentempiés de un tinglado pensado, precisamente contra ellos.