sábado, 5 de julio de 2014

¿Qué decirle a los jóvenes de hoy?

       Era Luis Alberto de Herrera –el Viejo-, quien decía en una manera novedosa de interpretar el devenir histórico de la humanidad, que en la historia personal de los individuos, lo que hizo su padre, no tiene por qué cargarlo el hijo como una condena, pero que en la historia de los pueblos, lo que los adultos hacen, lo terminan pagando las nuevas generaciones.
       Lo que no es verdad para el individuo –decía-, es sin embargo cierto, para la historia de los pueblos.
       Cuando un padre erra el camino, el hijo igual puede salir a flote en la vida, pero cuando toda una generación se equivoca, la que viene, es quien paga las consecuencias.
       Los jóvenes son quienes van a heredar un Uruguay destruido por un Parque Jurásico de resentidos y ladrones, enquistados en una ideología que saben perimida.
       Los jóvenes son quienes van a pagar los platos rotos de la desaceleración económica que se avecina y quienes carentes de visión política, van a querer buscar soluciones, sin entender lo que pasa.
       Los jóvenes van a vivir en un Uruguay sin códigos morales en donde la conducta correcta se vuelve inoperante y solamente, la prepotencia, el destrato y la ausencia de normas definen la convivencia cotidiana.
       Frente a esta situación, los que hoy peinamos canas, sentimos una enorme responsabilidad histórica sobre nuestros hombros y con congoja nos preguntamos: ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy?
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como José Gervasio Artigas y sepan defender la autonomía en el marco de la coparticipación federal como él la quiso y no pudo! ¡Qué no se dejen llevar por el canto de sirenita del centralismo argentino y defiendan un oriente, que los distingue como orientales!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como el Libertador Juan Antonio Lavalleja, que era honesto, era lúcido, era valiente!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como José Pedro Varela y defiendan la escuela y la instrucción, no por imposición autoritaria, sino sabiendo volver querible el acceso a los bienes de cultura?
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como Eduardo Acevedo y ante la calumnia contra Artigas, refuten minuciosamente todas las mentiras del libelo de Cavia con la cual los argentinos, aún hoy, se siguen manejando!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como Francisco Lavandeira y ante el fraude electoral se levanten enérgicos en defensa de la pureza del sufragio!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como Lorenzo Carnelli, un hombre del Partido Blanco Radical, que creó la Caja de Jubilaciones y Pensiones, la ley de trabajo nocturno, la ley de la vivienda decorosa, la prevención de accidentes, el descanso semanal, la licencia obligatoria, el salario vacacional, además de su prédica por la acción organizada de los trabajadores en los sindicatos y a quien el derecho laboral uruguayo le debe mucho!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como Wilson y lleven las banderas republicanas de la libertad, la democracia y el civismo bien en alto, se encuentren en el lugar del mundo en que sea!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como Carlos Julio y defiendan la matriz social de la campaña uruguaya, en una economía como la nuestra que tiene siempre dificultades de vertebración!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como Fernández Crespo que desde su ingreso al Parlamento y hasta su muerte, fue llevado por el voto popular a ocupar en forma sucesiva e ininterrumpida todos los cargos electivos establecidos por la Constitución uruguaya! ¡Qué es llevado a la Presidencia del Consejo Nacional de Gobierno en las elecciones del año 1962 y que a su labor y trajinar político el Uruguay le debe la Ley de Seguros de Accidentes de Trabajo, la jubilación de la mujer, leyes sobre Bolsa de Trabajo y subsidios por desempleo para distintas actividades, jornadas especiales para la industria insalubre y mucho más!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué existe derecho laboral en el Uruguay, porque existió Partido Nacional de Carnelli a Fernández Crespo!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué otro Uruguay es posible porque no todo está perdido tras estos 10 años de desgobierno sistemático!
     ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué ser blanco no es para cualquiera que no sienta el Uruguay en su piel y que exige mucho conocimiento histórico, jurídico, político y parlamentario de los temas que se tratan!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué no alcanza con legislar, si también no se es un defensor de todas las leyes existentes!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué el Uruguay lo construimos cuando el partido ganador es también, el gobierno de todos los uruguayos y no de una fracción irresponsable y sectaria!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué primero está la Nación, después el partido, después el sector y en última instancia, las motivaciones personales y no al revés!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué existe libertad política, porque existe soberanía nacional y que ambas cosas son impensables, fuera de la independencia económica! ¡Qué cuando se juega irresponsablemente con la economía, se está hipotecando la libertad y la soberanía nacional!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué los cargos que se ocupan en política hay que ganárselos convenciendo, hablando, golpeteando sobre la conciencia, martillando sobre la renuencia!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué para triunfar en la vida hay que estudiar mucho y que no se concibe ningún triunfo, fuera de la formación y la enseñanza! ¡Qué solamente una magna de anormales, que crecieron al calor de un mundo de anti valores, puede salir a incendiar escuelas!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué el Partido Nacional ha sido quien ante los desbordes del autoritarismo, supo plantarse y decir, “hasta aquí llegaste”!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué sean como Aparicio Saravia y sepan que cuando las urnas hablan, lo que dicen es sagrado, aunque no nos convenga!
       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué tendrán que enfrentar un mundo de hombres caducos, obsoletos y acoquinados en su inanidad esencial ante la vida!

       ¿Qué decirle a los jóvenes de hoy? ¡Qué el porvenir no existe, existe el por hacer, porque lo que va a venir, es lo que tendrán que hacer!