domingo, 22 de septiembre de 2013

Entre la Heladera y $endic


       Uruguay por ahora no es Chile en donde la opinión pública femenina puede cambiar un resultado y las fuerzas políticas que compiten tienen que poner una mujer de abanderada, para evitar el discurso de las feministas de izquierda, que solo argumentan con razones de género, poniéndose de víctimas.
       En Uruguay gobiernan la Intendencia de la capital desde 1990 y el país desde 2005, de modo que cualquier crítica que desde la izquierda se le quiera hacer al gobierno, al primero en no convenirle es a ellos mismos.
       Todos vimos lo que le costó a Mónica Xavier renunciar al cargo de parlamentaria para ocupar la Presidencia del Frente Amplio, y lo que fue la puja entre Eduardo Fernández y Roberto Conde. Lo que está indicando la voracidad de cargos en una fuerza que se ha pasado la vida diciendo que lo suyo no es electorero. Según Constanza Moreira, “el que no tiene partido no existe” y si se lo analiza correctamente lo que debiera decir es que quien no tiene cargo político parlamentario no gravita en nada.
       Este hecho a mí entender no es malo. Es muy bueno que así sea, pero entonces hay que poner las cosas en su lugar y defender la institución parlamentaria en toda su latitud imaginable. No es serio que los parlamentarios del Frente hagan campaña electoral, escupiendo del plato donde comen.
       Allí los cargos políticos son por rigurosa y matemática cuantificación electoral, por eso no puede llamarle la atención a nadie que la figura del Vicepresidente para ellos, sea lo más importante de todo.
       Como muy bien decía Raúl $endic “si le metemo’ una heladera, igual ganamo’”, a lo que habría que agregar que si le ponen una Vice heladera, también van a ganar. Al parecer es un mal endémico que tiene el Uruguay, de aquí a la eternidad.
       Como bien sabemos el tiempo no se mide en años sino en eones, por lo que al parecer si eones de tiempo condujeron al triunfo del Frente Amplio, tardaremos eones de tiempo en poder salir de esto. En eso Botinelli y el sordo la tienen clara.
       $endic tiene recur$os múltiples que el hecho de estar en un ente como Ancap brinda a granel, entre ellos una excelente relación con Máximo y la Cámpora. No precisa sentir sana envidia como Topolansky, sino que otros sienten por él, esa suerte de “sana” envidia, en un ente que pierde un millón de dólares por día.
       Haber estudiado en Cuba, no es como muchos creen algo malo, al contrario le hizo ver que por ahí no va la cosa y salió hecho un perfecto industrial y comerciante. Que el padre lo haya rechazado a él y sus amigos, tampoco es lo malo, puesto que le permitió buscar horizontes intelectuales fuera de ese mundillo enfermo, siempre a los alrededores del PCU, que el 26 de marzo lo haya expulsado de sus filas es al parecer lo más prestigioso de su carrera, porque como todos sabemos los ultras trabajan para los otros.
       Más allá de esto, si bien es cierto que la Vicepresidencia da visibilidad y escenario para que la televisión les haga un reportaje a cada rato, como han hecho hasta ahora –probablemente estén arrepentidos, ley de medios mediante-, la historia nacional demuestra que los Vicepresidentes son precisamente, los que se la ligan todas y terminan en el más absoluto anonimato político, de Enrique Tarigo a Gonzalo Aguirre pasando por Nin Novoa y Astori –el hombre colocado allí a la fuerza-, hasta el mismísmo Luis Hierro el culpable, al parecer para muchos, de todo lo malo. Ser Vicepresidente, como lo comprendió el bueno de Sapelli no es negocio.
        La Vicepresidencia sirve para dar la palabra en el Senado, tocar la campanilla y ocupar el cargo de Presidente cuando éste sale del país. El Vicepresidente ideal tiene que ser una sombra del caudillo y saber pasar desapercibido y eso, en una fuerza tan caudillista como el Frente Amplio, no le da poder propio de convocatoria sobre nadie.
       Más allá de todo esto, en el Frente Amplio el factor género es muy fuerte. Hoy dicha fuerza es un matriarcado de feministas divorciadas y esa es la razón por la cual las encuestas a boca de teléfono, siempre lo van a poner como la fuerza mayoritaria; esa es la razón por la cual la delincuencia juvenil aflora en Pocitos, Carrasco y Malvín cuando se aproxima la campaña electoral. Pasada ésta se concentra en los barrios en que se origina.
       En eso Astori la tiene clara, lo mejor es que sea una mujer prepotente y sectaria, que no entienda nada de economía y que no se le ocurra intervenir al respecto.
       Es, como se puede apreciar, impredecible lo que ofrece el Frente Amplio para competir electoralmente. Ni figuras, ni programa a la medida del Hombre –ya sabemos quién-; es una caja de sorpresas que va del “neo desarrollismo” a la “profundización del socialismo”, de convertir al Uruguay en Provincia Argentina a prepararse para una guerra contra el centralismo porteño.
       Al parecer estas cosas que definen el destino nacional –puesto que como dice Botinelli y el sordo son los seguros vencedores- no importan.
       ¡Pobrecito el Uruguay!

viernes, 20 de septiembre de 2013

Frente Amplio: A quien peor.



        Según  la promoción de la imagen que se pretende vender de la senadora Constanza Moreira, se dicen varias cosas que buscan hacerla atractiva para los desencantados del Frente Amplio, que al parecer son más de lo que a primera vista se puede creer.
        Es la mujer que reta al seguro presidente de los uruguayos, pero que al oficiar como oposición interna, lo alivia mucho a Vázquez, porque le quita la gente rara que reclama cualquier despropósito. Es, según lo plantean, una competencia que viene a darle interés y motivación a la gente, porque ir a una interna con un candidato único, le quita centralidad en el escenario político a una fuerza de la magnitud del Frente.
        Al rastrillar desde posiciones ideológicas –poniéndose a la izquierda del aparato político-, evita la dispersión, barre por izquierda y todo eso manteniendo un perfil que los politólogos llaman catch all, esto es, agarra todo.
        El Frente es vida y milagro. Es coalición por su historia, movimiento por las organizaciones sociales que controla y partido a todos sus efectos por el aparataje interno burocrático que tiene, en el sentido más estricto de la palabra burocracia, -buró oficina, cracia poder. Son oficinas con poder político interno.
        Gana las elecciones metiendo pechera con las organizaciones sociales y gobierna desde un aparato avejentado y estalinista puro y duro. Algo que llama la atención a cualquier observador extranjero, porque gente así es precisamente, la que fue marginada y expulsada hace ya bastante tiempo atrás, a nivel mundial. Se ha dicho, no sin razón, que si Gramsci no hubiera estado preso, hubiera también marchado a una purga.
        Mientras el Eurocomunismo, para quitarse a los estalinianos hablaba en los años 70’ de un socialismo de rostro humano, frente al impersonalismo de la burocracia de izquierda, Constanza Moreira habla de “ponerle el cuerpo a las ideas”, porque como todos sabemos, como consecuencia de esa socio-cultura que inventó el Frente, los ángeles son asexuados y no hay “angelitos negros”, ni angelitas mujeres.
        En esa puja tan grande con la Presidenta del Frente, Mónica Xavier, dice Constanza Moreira, “Hablé con la jefa, le dije ‘allá voy’, voy a decir que sí”, prometiendo, tuvo que decirlo, “una campaña lo más fraterna y lo más solidaria posible”.
        Son alternativistas, y buscando una alternativa lo ponen al Partido comunista entre la espalda y la pared, porque entre la espada y la pared hace rato que ya no están.
        Ente la sellada –Vázquez- y el alternativismo –Moreira-, ponerse del lado de ella es ligárselas todas, ya que nadie va a creer que ese sello que se llama PVP mueve los hilos de algo. Al Partido Comunista nunca le hizo gracia que le usen su aparato para el aventurerismo alternativista, y menos cuando tiene la sartén y el mango todo junto a la vez, poniéndose al lado de Vázquez.
        Al Partido Comunista le seduce ponerse a la izquierda como crítico, pero en ese juego de máscaras para incautos, no le hace ninguna gracia llevar de abanderada una cosa que escapa a su control. Solamente en Chile, en donde tiene que ocultarse, acepta eso. No es el caso del Partido Comunista Uruguayo, más preocupado en el dos de la muestra, que en la abanderada de una supuesta alternativa sin base social que se identifique claramente. El PCU entre ser cabeza de ratón o cola de león, no duda por la última opción, a condición de que acompañe a Vázquez un hombre que estudio y se formó en Cuba, como Raúl Sendic.
        Mientras argumentan estar preocupados por las bases programáticas, tema que los inhibe al parecer para hablar de candidaturas, van haciendo sub lema con otros sectores internos y fundamentalmente, con el de Sendic.
        Nada indica, por lo que se percibe, que Constanza Moreira represente alternativa alguna. Basta oírla razonar:
        “No veo que los derechos de las personas puedan hacerse efectivos si no hay una propuesta por izquierda desde el punto de vista económico. No podés satisfacer derechos a todas las personas si no redistribuís. Yo no conozco otra que sacarle un poco a los de arriba y darle a los de abajo. La lógica de distribución que nosotros tenemos es impuesto versos gasto público social. Cuando empieza este gobierno hay algún discurso que dice que la manera de redistribuir es el gasto público social, después el eje va cambiando ideológicamente hacia un discurso de tocar la política tributaria. Entonces tenés política tributaria, empleo y gasto público social, esa es la ecuación distributiva. ¿Por qué los gobiernos de izquierda son más exitosos redistribuyendo que los de derecha? No es solamente por un problema de ideas, sino porque los gobiernos de izquierda alteran la ecuación económica. Entonces aquellos que ganan el poder político les pueden imponer a los que tienen el poder económico el precio de vivir en comunidad, poniéndoles límites a las ganancias derivadas del capital”.
        Como se puede apreciar es exactamente lo que no hay que hacer: alterar la ecuación económica y matar la gallina de los huevos de oro para despilfarrar a expensas de los que trabajan y producen.
        Si esta es la alternativa a Vázquez, más vale malo conocido que peor por conocer.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

El Frente que se viene y el discurso que se prepara.


NAP, (Nueva Agenda Progresista)  bien podría llevar esas siglas por una constatación algo diferente y llamarse Novedosa Artimaña Progresista.
Ellos se presentan como parte de una asociación ciudadana de aporte al pensamiento del país que se viene. Se sienten parte del conglomerado mal llamado progresista, porque del positivismo de Augusto Compte tienen muy poco. Dicen que no son una asociación partidaria y que sus objetivos no refieren a candidaturas presidenciales o debates orgánicos de fuerza política alguna, lo que significa en buen romance, que son un frente dentro del frente.
Entre sus objetivos confesables declaran que buscan un ámbito de intercambio y discusión de ideas y alternativas e iniciativas, como si los órganos para los cuales el progresismo ha estipulado que allí se debate no existieran o no les sirviera. Quieren combinar experiencias y saberes ligados a la técnica, la gestión, lo público y el universo de la sociedad civil. Si uno lo piensa fríamente, están reconociendo que en realidad el Frente Amplio no sirve absolutamente para nada.
Decir, por ejemplo, de buenas a primeras que el crecimiento económico y la distribución son cosas muy fáciles de alcanzar y que el Uruguay está en una relación virtuosa, cuando lo que han hecho es ponerle el palo en la rueda a cuanta inversión nacional ha existido, es de una hipocresía muy grande.
Dice Álvaro García: "Crecer y distribuir, ya lo hicimos, así que se puede seguir haciendo si hay voluntad. Vamos a seguir haciéndolo" y presentarse como alternativa diferente, es una mentira lisa y llana, porque implica el reconocimiento de que se han pasado tirando manteca al techo con los dineros del contribuyente asfixiado como nunca antes en nuestra historia por la carga impositiva.
No invirtieron en políticas sociales. Compraron sectores al mejor estilo peronista de los planes trabajar para contar con un sector cautivo de parias sociales y mentales que cuando le critican el Frente Amplio se arremangan para pelear.
Venimos ahora a enterarnos por Gabriel Oddone que afirmar que “los impuestos son los principales responsables de la distribución del ingreso” es “parcializar la discusión”, e instó a ampliar el debate al "esquema impuestos-transferencias", y que “focalizar más y mejorar la calidad del gasto público social es la clave para aumentar la equidad”.
Todos sabemos que se pasaron la vida diciendo que iban a hacer políticas anti cíclicas y que en la recesión económica iban a invertir en obra pública y en la curva expansiva de la economía a economizar en prevención a las épocas recesivas. Hicieron exactamente lo contrario. Tomaron el crecimiento que la economía uruguaya comenzó a vivir a partir de agosto del 2003 y aumentaron tanto la deuda externa, como el gasto social sobre la base de la mayor asfixia económica al que genera riqueza y trabaja. No contentos con eso liquidaron a la clase media con el impuesto a la renta y encima de todo el clientelismo a la peronista fomentaron, primero con Vázquez y José Díaz y luego con el gobierno de Mujica la delincuencia más descarada que jamás hallamos vivido. Hoy los delincuentes son los dueños de la calle y la única preocupación de Vázquez después de 23 años de Frente Amplio en Montevideo y 8 gobernando es averiguar en qué año nacieron los delincuentes, porque venimos a enterarnos de la novedosa teoría de que si nacieron cuando los gobiernos blancos o colorados, la culpa es de quien gobernaba el día que la madre los traía al mundo, no de ellos que han gobernado hasta ahora.
Han tenido la recaudación impositiva más feroz de todos los tiempos y lo único que han sabido hacer por inoperancia, corrupción y viveza criolla es degradar las matrices sociales hasta niveles impensados en el pasado.
Ferreri de la Impositiva que se jacta del estropicio y muy suelto de cuerpo sostiene que los uruguayos somos sujetos de derecho, olvida, que en todos los países del mundo existe una cosa que se llama derecho del contribuyente. El contribuyente como paga, también exige. En el Uruguay el contribuyente tiene la obligación de pagar y en cambio ningún derecho para reclamar sobre qué se está haciendo con su dinero. ¡Qué hace la Intendencia Municipal de Montevideo cuando la ciudad es la más mugrienta del país! ¡Qué hace el Estado para ofrecer servicios acordes a la carga tributaria que impone!
Reconocer olímpicamente que no ha existido una buena utilización de los recursos públicos y salir a hacer campaña como si fueran oposición y gobierno todo junto a la vez es la triquiñuela para incautos, para gente que no sabe qué contestar cuando discute con alguien de la oposición.
Esta suerte de NAP o Novedosa Artimaña Progresista, carece de apoyo en la estructura frentista, es un frente dentro del frente que va a ser saboteado sistemáticamente por el Partido Comunista, no viene a plantear cosas mejores, sino a darle a Vázquez el programa narcisista y egocéntrico que precisa para decir cualquier cosa y hacer lo que le viene bien. Llama la atención que desde que Vázquez se fue del Partido Socialista, el sector médico esté ausente de tanta reflexión extra partidaria. También llama la atención que mientras esta NAP dice eso, el MPP esté a un tris de profundizar las cosas hacia lo de Chávez y que mientras Argentina más los humilla, más de acuerdo con el kircherismo están.
 Son paradojas de la política o mejor dicho para jodas.