NAP, (Nueva
Agenda Progresista) bien podría llevar
esas siglas por una constatación algo diferente y llamarse Novedosa Artimaña Progresista.
Ellos se
presentan como parte de una asociación ciudadana de aporte al pensamiento del
país que se viene. Se sienten parte del conglomerado mal llamado progresista,
porque del positivismo de Augusto Compte tienen muy poco. Dicen que no son una
asociación partidaria y que sus objetivos no refieren a candidaturas
presidenciales o debates orgánicos de fuerza política alguna, lo que significa
en buen romance, que son un frente
dentro del frente.
Entre sus
objetivos confesables declaran que buscan un ámbito de intercambio y discusión
de ideas y alternativas e iniciativas, como si los órganos para los cuales el
progresismo ha estipulado que allí se debate no existieran o no les sirviera.
Quieren combinar experiencias y saberes ligados a la técnica, la gestión, lo
público y el universo de la sociedad civil. Si uno lo piensa fríamente, están
reconociendo que en realidad el Frente Amplio no sirve absolutamente para nada.
Decir, por
ejemplo, de buenas a primeras que el crecimiento económico y la distribución son
cosas muy fáciles de alcanzar y que el Uruguay está en una relación virtuosa,
cuando lo que han hecho es ponerle el palo en la rueda a cuanta inversión
nacional ha existido, es de una hipocresía muy grande.
Dice Álvaro
García: "Crecer y distribuir, ya lo hicimos, así que se puede seguir
haciendo si hay voluntad. Vamos a seguir haciéndolo" y presentarse como
alternativa diferente, es una mentira lisa y llana, porque implica el
reconocimiento de que se han pasado tirando manteca al techo con los dineros
del contribuyente asfixiado como nunca antes en nuestra historia por la carga
impositiva.
No
invirtieron en políticas sociales. Compraron sectores al mejor estilo peronista
de los planes trabajar para contar con un sector cautivo de parias sociales y
mentales que cuando le critican el Frente Amplio se arremangan para pelear.
Venimos
ahora a enterarnos por Gabriel Oddone que afirmar que “los impuestos son los
principales responsables de la distribución del ingreso” es “parcializar la
discusión”, e instó a ampliar el debate al "esquema
impuestos-transferencias", y que “focalizar más y mejorar la calidad del
gasto público social es la clave para aumentar la equidad”.
Todos
sabemos que se pasaron la vida diciendo que iban a hacer políticas anti cíclicas
y que en la recesión económica iban a invertir en obra pública y en la curva
expansiva de la economía a economizar en prevención a las épocas recesivas.
Hicieron exactamente lo contrario. Tomaron el crecimiento que la economía
uruguaya comenzó a vivir a partir de agosto del 2003 y aumentaron tanto la deuda
externa, como el gasto social sobre la base de la mayor asfixia económica al
que genera riqueza y trabaja. No contentos con eso liquidaron a la clase media
con el impuesto a la renta y encima de todo el clientelismo a la peronista
fomentaron, primero con Vázquez y José Díaz y luego con el gobierno de Mujica
la delincuencia más descarada que jamás hallamos vivido. Hoy los delincuentes
son los dueños de la calle y la única preocupación de Vázquez después de 23
años de Frente Amplio en Montevideo y 8 gobernando es averiguar en qué año
nacieron los delincuentes, porque venimos a enterarnos de la novedosa teoría de
que si nacieron cuando los gobiernos blancos o colorados, la culpa es de quien
gobernaba el día que la madre los traía al mundo, no de ellos que han gobernado
hasta ahora.
Han tenido
la recaudación impositiva más feroz de todos los tiempos y lo único que han
sabido hacer por inoperancia, corrupción y viveza criolla es degradar las
matrices sociales hasta niveles impensados en el pasado.
Ferreri de
la Impositiva que se jacta del estropicio y muy suelto de cuerpo sostiene que
los uruguayos somos sujetos de derecho, olvida, que en todos los países del
mundo existe una cosa que se llama derecho
del contribuyente. El contribuyente como paga, también exige. En el Uruguay
el contribuyente tiene la obligación de pagar y en cambio ningún derecho para
reclamar sobre qué se está haciendo con su dinero. ¡Qué hace la Intendencia
Municipal de Montevideo cuando la ciudad es la más mugrienta del país! ¡Qué
hace el Estado para ofrecer servicios acordes a la carga tributaria que impone!
Reconocer
olímpicamente que no ha existido una buena utilización de los recursos públicos
y salir a hacer campaña como si fueran oposición y gobierno todo junto a la vez
es la triquiñuela para incautos, para gente que no sabe qué contestar cuando
discute con alguien de la oposición.
Esta suerte
de NAP o Novedosa Artimaña Progresista, carece de apoyo en la estructura
frentista, es un frente dentro del
frente que va a ser saboteado sistemáticamente por el Partido Comunista, no
viene a plantear cosas mejores, sino a darle a Vázquez el programa narcisista y
egocéntrico que precisa para decir cualquier cosa y hacer lo que le viene bien.
Llama la atención que desde que Vázquez se fue del Partido Socialista, el
sector médico esté ausente de tanta reflexión extra partidaria. También llama la atención que mientras esta NAP dice eso, el MPP esté a un tris de profundizar las cosas hacia lo de Chávez y que mientras Argentina más los humilla, más de acuerdo con el kircherismo están.
Son paradojas de la política o mejor dicho para jodas.