Hoy
por hoy, el cáncer tiene Vázquez y si el enfermo, en ese estado, vocifera un
día sí y otro también, más impuestos para aquellos sectores que no le votan,
como el agro por ejemplo o la clase media que le dio la espalda, es un
indicador clarísimo de que aquí los únicos que tienen que pagar más, muchísimos
más impuestos, son los oncólogos.
¡Son
órdenes de Bushhhhhhh….
La
gente está empezando a darse cuenta, de
qué cuerina se hacen los tambores para candombear.
“Chacha mulato, chacha de aquí, chacha mulato,
chacha esas manos que hacen chachas en el tamboril”.
Si
fuera por mí, le regalo la leche en polvo a Cuba y a cambio pido una sola cosa,
oncólogos que trabajen por la comida y oncólogas con servicio especial incluido.
No
falta quien crea que me hice comunista, pero también, no va a faltar quien
diga: “Raúl seguro, a estos tipos dales
duro”.
Son
el producto de un cáncer nacional, que hoy, cuando la sociedad uruguaya está en
estado terminal, no convencen a nadie, por la sencilla razón, de que la única
solución aquí, va a ser la eutanasia.
Estamos
en un mundo geopolítico multicolor, que está al borde de pasar a ser financieramente
multipolar, para convertirse belicistamente, en bipolar nuevamente y, no se ve
la razón por la cual, no puedan venir oncólogos cubanos, a cambio de leche en
polvo.
Eso
sí, y ahí hay que ser estricto, el oncólogo uruguayo debe pagar muchos más
impuestos.
Si
eso llegara a ocurrir, se terminan los Salvador Allende, los Che Guevara, los
Vázquez. Cuba salva “el honor” con
la leche el polvo y todos nosotros, vamos a respirar aliviados, sin estos tipos.
Uruguay
precisa un acuerdo maduro, inteligente, como los que quería Haya de la Torre en
el Perú de su tiempo. Él no hacía cualquier acuerdo con los rusos, sino aquel
que dañaba y desautorizaba, al partido comunista peruano. Era un relativista
sin suerte, pero lo que planteaba vale
un Perú.
El
Brics, por ejemplo, hoy en día, es una ventana de oportunidad para hombres como
Astori, desesperados por ver como se los saca de encima, pero con autorización “progre” del Soviet Supremo.
Pese
a eso, no lo quieren, ni regalado, en ningún lado. Sólo con el banco Ambrosiano,
puede lograr acuerdos puntuales.
Mientras,
el delito campea entre el crimen organizado, el terrorismo y los asaltantes.
Nadie
puede hacerle nada. Es karma de vidas anteriores y el gobierno opina, echándole
la culpa a la oposición. Y en tanto, embarran la cancha por un lado, por el
otro piden un acuerdo político para combatir el delito, justamente en un año
electoral en donde es inconstitucional votar partidas presupuestales nuevas.
Es
la vieja técnica de la izquierda: Te insulto primero y vamos al acuerdo
después, pero lo hacen, precisamente cuando, en un año electoral, no puede
haber ampliación presupuestal. Todo eso para salir a decirle a su hinchada
cualquier cosa.
La
gente, sin embargo, está comenzando lentamente, a darse cuenta de algo, que hay
que saber interpretar.
Quieren
terminar con la época, en donde el que sabe, sabe y, el que no sabe, es
jefe.
Quieren una gestión signada por la llaneza y
la capacidad de convencer en torno a lo que se hace y no con técnicas de ordeno y mando.
Quieren
terminar con el país de las islas en
donde cualquier funcionario subido al caballo, hace lo que se le canta.
El
hermano de Vázquez, El Perro, dice
que no nos preocupemos, mientras el director nacional de Policía, Julio
Guarteche, habla con la verdad y sostiene que todo esto se lo veía venir, y que
ahora avanza peligrosamente, a un terreno desconocido, que los supera en
capacidad técnica.
Ahora,
resulta que nada menos que Bonomi, “la
veía venir y alertaba”, cuando es el directo responsable de todo lo que
está ocurriendo.
Para
el Taba hay móviles políticos detrás
de todo esto. A quién creerle ¿ a Julio Guarteche que está enfrentando una
cuestión que le supera, o al Taba? ¿Cómo
se concibe, en estos términos un acuerdo político, mientras gobierne esta
gente?
Es
como cerrar la puerta y tirar la llave por la ventana.
Si
hoy no hay ómnibus, ni taxis que quieran ir a ciertas zonas, es porque el
Frente Amplio reclutó basura social para sobrevivirse políticamente allí,
apelando a todos los métodos inimaginables, en dónde el narcotráfico, es una
buena herramienta para combatir el capitalismo y la burguesía nacional, como ya
lo decía Fidel Castro.
Si
hoy los servicios tanto públicos, como municipales están descaecidos es porque
durante 25 años de gobierno en la Intendencia de Montevideo y 10 a nivel
nacional no han hecho otra cosa, que destruir todo lo que pudieron.
Si
en el Uruguay actual es lo mismo trabajar, tener hijos y sostener una familia,
que vivir de planes sociales, entonces entramos en un mundo de anti valores.
Si
Benitin y Eneas desde un Comité de Base deciden aspectos sustanciales del
comercio exterior y la política nacional, poco se puede esperar.
Hay
un alerta naranja en todo el país.
Se
viene el Barantután.