viernes, 2 de octubre de 2015

Un miedo cerval a la verdad



La pérdida del grado inversor a Brasil, resuelta por la calificadora de riesgo Stándar % Poor’s era previsible que tenía que suceder. No se entiende cuál puede ser la razón por la que, en un momento en que en el Uruguay la inflación trepa por encima de 10%, el crecimiento baja, la importación acompaña la subida del dólar y la inflación en una mecánica diabólica en donde lo importado sube por la inflación y si sube el dólar, también por el mismo, las exportaciones comienzan a caer, la zona fronteriza con Brasil liquida a los comercios chicos, la agricultura tiene dificultades energéticas, climáticas, financieras y ahora de mercado, la industria no sobrevive ni a la inflación de costos, ni a la rigidez de la mano de obra, ni al achicamiento del mercado en plena desaceleración de la economía, crece la desocupación en rubros claves que fueron para Keynes variables fundamentales como la construcción y la obra pública, sin embargo, Stándar % Poor’s en el Uruguay no tenga gente que le informe ese dato.
          ¿Estarán esperando que pasen 6 meses de la devaluación enorme que se viene en la Argentina, para darse por enterados de lo que ocurre en el Uruguay?
          Esta gente que hoy circunstancialmente nos gobierna tiene, lo he dicho en otros post durante la campaña electoral pasada, un miedo cerval a la verdad y cuando se encuentran delante de la realidad, hacen la del avestruz. En eso y solamente en eso, efectivamente son batllistas.
          Esperan sentados, como quien espera que pare de llover que baje la presión alcista sobre el dólar, en el preciso instante que algunos bancos están teniendo problemas de liquidez y que se cortó desde hace ya un buen tiempo el crédito generalizado de otra época cuando las financieras con chicas bonitas y volantes hacían propaganda por la calle.
          Donde el Banco Central se descuida, Mesa de Cambio ese día, al realizar el arbitraje, encuentra que el dólar se le fue de las manos, justamente un jueves, que es cuando saben mejor que nadie, que es el día de la semana más favorable para comprar, el dólar trepó por encima de $ 29. A un ritmo de 1,24% al mes, nueva tablita soto voce, pero esta vez con tasas de interés positivas y no negativas, como en los tiempos de los marcianos y de Valentín Arismendi, nos encontramos como en aquel fatídico 82’’, con el cronograma de la crónica de una muerte anunciada de un 18,76% de devaluación anual y aguantada hasta mediados de diciembre, que es cuando el Parlamento termina de votar el Presupuesto.
          El Banco República, ese satélite a las órdenes del Central, ni tonto, ni perezoso le aumenta el margen de ganancia al spread de los cambistas y lo lleva a una diferencia de 0.55% entre el dólar comprador y el vendedor, para que el que compra tenga que pasarse un buen tiempo sin vender.
          Las empresas formadoras de precio, en una economía monopolizada como la uruguaya, no quieren la moneda nacional y prefieren el billete verde, no porque les guste ese color particularmente, sino porque el Uruguay no tiene el derecho de señoreaje de esa moneda, que sólo puede emitir un país extranjero como Estados Unidos y no les interesa la cifra que le pone el Uruguay a los billetes que emite, para financiar cargos políticos, asesores, amigos y los 50 mil empleados públicos más que pusieron en el Estado.
          Esto se da en un marco regional en donde Argentina gane quien gane las elecciones va a tener que ir a un ajuste severo de la paridad monetaria y un Brasil que ya la hizo devaluando la moneda en un 51%.
          Frente a este hecho, el gobierno además de perder dinero cuando vende dólares por debajo de su precio, hace que los exportadores no le vendan a nadie y encima cuando quieren ir a lo que Cristina Kirchner llama “precios amigables” se encuentra que las verdaderas empresas formadoras de precio son las importadoras que dependen fisiológicamente del dólar. El único que creía en el “precio justo” era Santo Tomás de Aquino, porque de Adam Smith a la fecha, sabemos que no existen precios fraternales y cosas así, sino oferta y demanda.
          Gobiernan con una mezcla rara de cinismo, ignorancia y mala fe, siempre hablando y razonando para la hinchada de la barra.
          A todo esto se suma la primavera uruguaya en pleno invierno que no cesa con su frío polar. Una primavera que ahora está a un tris de volverse árabe. Estamos hablando de gente que los votó y los vota, les firmaron un cheque en blanco y ahora son los primeros perjudicados en la puja distributiva de la repartija presupuestal. Sólo está faltando que salgan a manifestar gritando. “¡Nerón, Nerón, que grande sos!”.
          Les creyeron hasta la obsecuencia, dejaron hacer, delegaron el control político, se negaron al uso de la inteligencia recta justificando cualquier cosa por disciplina leninista, se convirtieron en mayoría silenciosa y ahora van camino a ser mayoría silenciada, muchedumbre solitaria o carne de cañón de los “ultras desalineados”
          De esa actitud moral complaciente surgió el caldo de cultivo que condujo a los abusos y las corruptelas que hemos vivido como botón de muestra en ANCAP y PLUNA, y en todos los entes recaudadores que recién ahora se empieza a saber.
          ¡A los maestros y profesores les hace gracia saber que ANCAP perdió 800 millones de dólares y les convence el argumento de $endic de que fue por diferencias cambiarias! Viendo los insultos que le propinaron todo indica que no. ¡Al sector de la salud le gusta enterarse que PLUNA perdió 300 millones de dólares y que Lorenzo sigue siendo una figura fenomenal para Astori y Cía!
          Las cartas están echadas y estos son los dados que se echan a correr. Tiempos hay para cada cosa dice el Eclesiastés, tiempos para la hora de la verdad, cuando el horno ya no está para bollos, también.
          La presión fiscal ya comenzó a aumentar y están desesperados por recaudar como si el dinero fuera un maná que llueve del cielo, ignorando la ley fundamental del derecho tributario, que reza así: a mayor presión, mayor evasión y ese agobio se acentúa cuando la economía está desacelerada; 33 empresas en el primer semestre fueron a concurso, que es una forma elegante de tipificar con nueva carátula el concordato y la quiebra. 80 concursan en un año, superando los 22 concursos del primer semestre de 2014.
          Las demás o despiden o les bajan el sueldo para no tomar tan drástica medida.
          El nivel de endeudamiento del sector público va a aumentar, porque los recortes son un leve maquillaje al despilfarro organizado, Si bien la contracción monetaria y la iliquidez frena la inflación usando el salario real como la variable de ajuste liquida el comercio y la industria ante la baja abrupta de la demanda que se genera. Es aquello de si me tapo la cabeza, tengo al descubierto los pies y si me tapo los pies se me ve la cabeza.
          El panorama no es nada alentador para mirar el futuro inmediato con optimismo y la falsa oposición del sindicalismo, meneando el rabo de filisteo para desmarcarse del descrédito ante el colapso que se avecina, anuncia un nivel de conflictividad más profunda, que esta gimnasia tonta que están haciendo hoy.
           Como decía el grande de Winston Churchill se puede mentirle a mucha gente durante mucho tiempo, pero no se puede mentirle a toda la gente, durante todo el tiempo.
          No son oposición, son la aposición acrítica y arrinconada. Los sindicalistas ya sabemos, están en la opo…  en la oportunidad