Hoy
hay una nueva forma de ligue gracias a Internet.
Los
que vivimos la época antes de Facebook, sabemos lo duro que fue aquello.
Hubo
un tiempo, haya en el Pleistoceno, y tal vez mucha feminista arrepentida nos
ayude a hacer memoria, en donde para poder formalizar una relación de pareja había que pedirle la mano al padre,
Si bien los institutos de Derecho Romano ya
no se aplicaban, eran parte de una suerte de derecho consuetudinario que se
aceptaba sin discutir, aunque ya no fuera legal.
Por
el Derecho Romano el pater familia
es dueño del buey, la mujer, la hija y la propiedad. El hijo es un hombre
libre.
La hija era del padre y había que pedirle la
mano.
Cuando
ligabas con una muchacha, lo primero que hacía ella era presentarte al padre y si te
aceptaba, que ya es decir, porque no permitía cualquier mequetrefe, podías los
domingos de tarde, ir a la casa a conversar con ella.
La
madre se ponía en el cuarto de al lado y escuchaba toda la conversación que la
hija tenía con el pretendiente. Al rato pasaba trayendo un café y te zampaba
algo que indicaba que había oído la conversación.
Tanto
ella como él, le daban cero bola al vejestorio y por detrás te la fifabas y
punto. Después venían las consecuencias y para no perder la honra, los casaban
a la fuerza.
Había también en aquellos tiempos, anarcos históricos, que dejaban que la hija durmiera con
el novio en la casa.
¡Tampoco
la pavada, Galimedes!
Con
Internet mejoró mucho.
Por
eso es importante que veas este video.
Hoy es mucho "más fácil"
Antes, había también hijas, que sabían plantarse ante la madre