martes, 24 de junio de 2014

La herencia maldita que el Frente le deja a la sociedad uruguaya.

        El actual gobierno y la fuerza política que representan, quieren hacernos creer, un día sí y otro también, que vivimos gracias a ellos en el mejor de los mundos posibles.
        A medida que vamos viendo el tendal que dejaron en estos diez años de desgobierno sistemático, uno constata que prácticamente, nada es rescatable para construir futuro.
        Si empezamos por las relaciones bilaterales en el MERCOSUR vemos allí que ha existido una verdadera degradación jurídica de dicho organismo por razones de carácter “político”, que no quedan claras bien cuales son. Cuanto más servilismo y condescendencia el Presidente Mujica tiene hacia Argentina, con más ferocidad ésta toma medidas, en una escalada interminable que afecta muchísimos puestos de trabajos. Le regalaron, no se sabe a santo de qué, el secreto bancario y siguen agachando la cabeza ante cualquier embate y exabrupto, porque lo único que les importa, es el día de asueto, cuando llegan las elecciones, para 40 mil uruguayos que viven en Argentina y vienen en masa a votarlos.
        En ese tren de destrucción de nuestra Cancillería, manosearon a Paraguay no respetando su Parlamento y fueron cómplices en la destrucción del puerto hub, que tuvimos.
        A este claro fracaso de la política de relacionamiento regional se le suman los disparates de querer intermediar en Colombia con la guerrilla y coordinar únicamente con las FARC, en una verdadera tomadura de pelo a todo el mundo. En vez de tener la cabeza en el comercio exterior uruguayo, la tienen en los niños que vienen de Siria. Están, como se dice vulgarmente, pa’ cualquiera.
        Lo del robo y el incendio en la escuela Flor de Maroñas es un indicador clarísimo del fracaso del MIDES en el abordaje de esa gente. ¿Por qué esa negativa a bajar la edad de imputabilidad penal de 18 a 16? ¿Para que siga habiendo fugas, como las del Hogar Femenino del INAU y la explotación sexual infantil siga a la orden del día? ¿Para que la sociedad viva en pánico por temor a cualquier aberración y “los ricos”, les agradezcan que “los estamos tranquilizando”, como decía Tabaré Ramón Vázquez Rosas? ¿Para reclutar infantos juveniles y lanzarlos contra la clase media que se les resiste? También aquí ha fracasado el MIDES, porque esa gentuza es de un individualismo tan grande, que no se hace ningún problema en matar al vecino de al lado.
        Debe ser para mantener un sistema de tortura a los menores recluidos en los centros del SIRPA, porque no cabe aquí, otra explicación.
        Estamos ante un sistema de degradación moral al estilo cubano que consiste, como denuncian las Naciones Unidas en palizas, posiciones de estrés como `el paquetito` -atar a las personas de pies y manos enganchando los grilletes por detrás-, castigos de carácter vejatorio y humillantes, incluida la desnudez forzada, castigos colectivos, registros sin ropa e invasivos y el uso de medios de coerción en el interior de los centros.
        El director del SIRPA, Ruben Villaverde –verdadero responsable de lo que allí ocurre-, recibe sin embargo protección y el Frente Amplio no quiere dejar de ser el paladín de los derechos humanos, pero tampoco pagar costo político por la tortura institucionalizada que Villaverde impuso. Todos sabemos que este señor, si es defendido y amparado de esta forma ha de ser porque es parte de un plan mayor, del cual la tortura significa un simple instrumento más.
        Aquí es donde se ve, con mayor nitidez que en cualquier otro tema, como queda cuestionada toda la infamia moral que el Frente Amplio representa; existen torturas en un gobierno frenteamplista y la necesidad de bajar la edad de imputabilidad es crucial. El Frente ya no ofrece garantías morales para nadie, ni para el pobre, la clase media o el rico, solamente para cubrirse entre ellos.
        Villaverde está cuestionado por las Naciones Unidas y protegido por la fuerza de gobierno.
        Según la información que dispone el Comité, “los centros Ser y Piedras, de la Colonia Berro, registran situaciones de hacinamiento agravadas por el hecho de que los menores permanecen hasta 23 horas al día confinados en sus celdas", dice el informe.
        ¿No se dan cuenta que esta gente desprecia los derechos humanos y la dignidad del hombre?
        El robo e incendio en una escuela de Flor de Maroñas es la señal del nivel de desidia, negligencia, irrespeto en todos los órdenes y pérdida del principio de autoridad en la cual la sociedad uruguaya fue entrando, producto de ese mundo de anti valores a los que el Frente Amplio quiere condenarnos. Crearon un monstruo social y ahora se les viene encima y no lo pueden parar.
        Todos sabemos que la escuela fue el buque insignia de nuestra dignidad de uruguayos.
        Esta manga de anormales es lo que una década de desgobierno frentista nos deja como herencia maldita para el futuro.