En el Frente Amplio hay una tendencia, a esta
altura histórica, que consiste en achacarle las culpas de todo a una supuesta
“derecha”, que no queda claro a que se están refiriendo.
He
demostrado hasta el cansancio en este blogger la manipulación tendenciosa de
dicha palabra: Todos sabemos que en el Uruguay acusar a otro de “derechista” es
un insulto, en cambio definirse “izquierdista” da impunidad para prácticamente
cualquier cosa.
Subidos
a esa retórica cada vez que tienen problemas internos, salen a buscar enemigos
de paja, fantasmas y a mentirle a la gente con el “cuco de la derecha”, cuando
todos sabemos que eso que el Frente llama “derecha”, en cualquier lugar del
mundo es un centro político democrático y moderado.
Dicen
que se inquietan frente al probable hecho de que el Frente Amplio carezca de
mayorías parlamentarias, cuando todos sabemos que para gobernar no se precisa
tener mayorías: Se puede votar en Sala una mayoría especial –la que le convenga
al partido de gobierno- y aprobar igual el proyecto de ley y, aunque esto es
claramente inconstitucional, igualmente de esa forma aprueban los proyectos
cuando necesitan mayorías especiales. De modo que el tema de si el Frente
Amplio llega o no a tener mayoría parlamentaria es más político que
parlamentario.
Están
haciendo lo único que saben hacer, terrorismo verbal agitando el Carlanco de la
“derecha” y tratan a su gente como los niños chicos de otra época cuando las tías
viejas le decían para que tome la sopa: “¡Cuidado que viene el Carlanco!”.
No
se dan cuenta o lo perciben y quieren ocultar el bulto, que el primer enemigo de
todo frenteamplista es el otro frenteamplista y que los ataques a Danilo Astori
provienen fundamentalmente, de los otros sectores. Empezando por Tabaré Vázquez
que en público frente a las cámaras de televisión lo destrató a Danilo Astori
en la campaña electoral del 99’, hasta todos los insultos que le exigieron
bajarse de la candidatura temeroso de competir con Vázquez, en la campaña de
2004, pasando por las cosas espantosas que los otros senadores del Frente le
decían cuando la devaluación de 2001; es histórico el hecho de que siempre al
llegar la contienda electoral Danilo Astori es el plato predilecto de los otros
grupos de izquierda. Eso sí, tienen que echarle la culpa a los otros, al Carlanco.
Astori
suele ser siempre el pato de la boda a la hora de competir por cargos electorales
dentro del Frente Amplio. Ante eso, no se entiende bien porqué para Alfredo
Asti tienen “que pensar desde ahora en octubre, como la meta para el triunfo de
un nuevo gobierno progresista". Y ¿Porqué no piensan en julio que es donde
se define quién lleva la batuta y quién no? Estamos en un esquema, como el que
plantea la ley electoral consagrada en la Constitución, en donde el que gana la
interna se queda con todo y también decide el candidato que va o no a las intendencias. A
Asamblea Uruguay insólitamente, le preocupa más octubre que la interna. Es algo
tan infantil, que ni ellos se lo pueden creer.
En
este momento, gente que Astori defendió a muerte está siendo indagada por
la Justicia y por ende, lo correcto es permitir que ella proceda. Como mínimo
tomar distancia. Así obra cualquiera que sepa qué significa la separación de
poderes, menos aquellos que es claro que tienen pensado un golpe al estilo
venezolano. Además no lo ocultan.
¡Quien
no percibe que es la misma forma de argumentar de Maduro en Venezuela, cuando
se lo apoya así salga a masacrar chiquilines como lo fueron ellos en otra época!
¿Qué
razón tuvo el ministro Pintado para entregarle a Mónica Xavier la declaración
jurada de sus bienes? ¿Ahora se acordó o ahora se lo pide la presidenta del FA?
El
único interesado en enchastrar la campaña electoral es el Frente Amplio que al
clásico estilo Vázquez y su Comando para la campaña electoral, como lo demostró
sobradamente en elecciones pasadas, sale a hacer cualquier desaguisado con
matones de esquina, todo a lo largo de Montevideo.
No forma parte de la tradicional seriedad de
nuestro sistema político “sacarle el culo a la jeringa” que la Suprema Corte de
Justicia les impone, atacando un supuesto Carlanco derechista.